por Mauro Flaming
 
La película plantea una hipótesis que hasta el mismo espectador podría haberse hecho alguna vez. ¿Qué tal si este mundo que conocemos, todo lo que nos rodea, no fuera real? ¿Y si todo fuera parte de otra clase de "realidad" en la que estamos sumergidos sin darnos cuenta?
En The Matrix un grupo de personas descubre la verdad, teniendo así la capacidad de torcer y hasta quebrar algunas reglas mientras pelean contra seres programados para mantener oculto el engaño.
Ellos tratan de que más y más personas sean libres, aunque llegado el momento de conocer la verdad cada persona posee -paradojicamente- la libertad de elegir: seguir viviendo bajo el cautiverio de la mentira o desprenderse del engaño.
El paralelo con la vida cristiana es claro. Estamos en un mundo de fantasía sin tener en cuenta que el mundo espiritual es más real que lo material. Como cristianos, al igual que en la película, tratamos día a día de llevar a más y más personas a la verdad, pero la decisión es personal. Cada uno elige permanecer en el sueño o despertar.
Estas y otras similitudes hacen de esta película una perlita que más allá de la fantasía y los buenos efectos especiales, tiene una trama digna de considerar y meditar.


Keanu Reeves, Laurence Fishburne y Carrie-Anne Moss
Escr. y Dir.: The Wachowski Brothers 1999 - AVH
144 min. P+13 años